CAPITULO 15

Llegué al parque donde le encontré sentado en un banco observando el cielo y le di un beso en los labios, me senté a su lado y le pregunte:

- ¿Tu me has regalado un vestido?

- Te lo ha dicho la dependienta, verdad- dijo riéndose.

Pasamos una tarde estupenda aunque Lucas parecía un poco distraído.

A las siete nos fuimos a casa. Estábamos en la puerta de mi casa, me iba a despedir de el cuando un Ferrari aparco frente nosotros y de el se bajo una chica que parecía una modelo o actriz, tenia el pelo largo y ondulado de color marrón claro, era alta y esbelta con un cuerpo que me dio envidia. Se acerco a nosotros pero sobretodo a Lucas y le dijo:

- Hola Lucas ¿que tal amore?- Plantándole un morreo en los labios.

Me quede petrificada, Lucas se aparto de ella y me miraron los dos y la chica me pregunto:

- ¿Tu quien eres?- tenia acento italiano.

Mire a Lucas pero el había apartado la mirada y no dijo nada encima ella le estaba agarrando del cuello. Lo único que pude decir:

- Soy Sara la vecina.

- Ah, Hola yo soy Francesca, la novia de Lucas

- Encantada, adiós.

Entre a casa corriendo para que no vieran mis lágrimas, no me lo podía creer con todo lo que me había pasado durante el día y encima resulta que él tenia novia y mientras tanto estaba conmigo.

Pero no le iba a dar el gusto de verme sufrir y encima teniendo un baile el sábado así que cogí mi móvil y llame a Alan. El teléfono sonó un par de veces y se oyó una voz dulce que me recordaba a mi mejor amigo, el que sentía algo por mí y se convirtió en mi amigo:

- ¿Diga?

- Hola Alan, soy Sara.

-¡Sara!, ¿que tal estas?

- He estado mejor- me entro la risa y empecé a reírme.

- ¿De que te ríes?- me pregunto Alan.

- De que siempre que hablo contigo te doy la misma respuesta cuando me preguntas que tal estoy.

- Eso es verdad y bueno ¿Qué te ha pasado?

- Como me explico he sido el segundo plato de Lucas porque resulta que tenía novia y estaba conmigo y creo que ellas es italiana y además actriz o modelo.

- Pues no pareces afectada la verdad.

- Es que he decido no darle el placer de verme sufrir.

- Eso esta genial y que sufra el un poco.

- Alan tenía que preguntarte una cosa.

- Dispara.

- ¿Te apetecería venir al baile conmigo?

Hubo un silencio en la línea:

- Claro, ¿te recojo el sábado a las nueve?

- Vale y gracias, te veo el sábado.

Nada mes colgar cogí el vestido y los zapatos que Lucas me regalo y me dirigí a la puerta de la casa de Lucas y los deje en la entrada, llamé y me fui para mi casa. Antes de entrar vi a Lucas coger las cosas y mirarme pero aleje la vista y me metí dentro de casa.

Llorando fui a donde mi madre y le conté todo lo que me paso y ella me consoló. Cuando ya podía hablar le pregunte:

- Y yo ¿Qué vestido llevo ahora?

Mi madre me sonrió de oreja a oreja y se fue.

Después de un rato volvió con un vestido en los brazos y me lo entrego junto con unos zapatos. Eran preciosos casi incluso mas que el que Lucas me había regalado. Era de color azul claro con volantes alternando ese color y el negro, de palabra de honor con piedrecillas por la parte de la espalda. No pude reaccionar solo conseguí pronunciar:

- ¡¡Guau, es impresionante!!

Mi madre me sonrió y me dijo:

- Te lo iba a regalar para el baile pero vi que Lucas te regalaba otro por lo que lo guarde.

- Gracias mama- le dije mientras la abrazaba.

- Bueno vete a dormir que mañana es el baile y tienes muchas cosas que hacer ya que eres colaboradora de la preparación.

Le di un beso y me fui a la cama, me dormí rápidamente.