CAPITULO 33
En la limusina no paramos de hacer bromas. Pero
cuando sentí que la limusina se paraba me puse nerviosa.
- Tranquila estas con nosotros- me intento
tranquilizar Manuel.
Mario me cogió la mano:
- No te sueltes de mi mano y todo estará bien. Y
sonríe todo lo que puedas- mientras me sonreía con una sonrisa preciosa.
Asentí mientras sonreía. La puerta se abrió y
Mario bajo primero tirando de mi. A mis pies se extendía una alfombra roja con
un montón de gente haciendo fotos y fans gritando, estaban retenidas por
vallas.
Mario se acerco a mi oído:
- Vamos- y se acerco al centro de la alfombra.
- Posa. -Mientras se reía.
Me rodeo con el brazo la cintura y yo apoye mi brazo
en su hombro.
Los flashes de las cámaras comenzaron a
dispararse rápidamente. Me estaba quedando ciega. Me acerque al oído de Mario y
le susurre:
- Después de esto nunca más podré ver.- y comenzó
a reírse.
Nos acercamos a unas fans que le pedían autógrafos
y el mientras firmaba y dedicaba, yo sonreía hasta que una chica me llamo:
- Sara, cantas genial
- Em gracias.- dije confundida entonces me acorde
lo que dijo Lucas.
- ¿Me puedes firmar un autógrafo?
- Si- me dio una foto mía cantando.
- ¿De donde has sacado la foto?
- Los fotógrafos te las tomaron en una boda.
- ¿Cómo te llamas?
- Sandra.
Le firme la foto con esta dedicatoria``Para
Sandra con cariño de Sara´´ y se la entregué.
- Gracias ¿nos podemos hacer una foto?
- Claro.
Me puse al lado de la chica y nos hicimos una
foto.
- Gracias -me dijo.
- El placer es mío- le sonreía.
Mario me llamo así que me despedí de ella. Agarre
la mano de Mario que me arrastro hasta donde estaban unos periodistas:
- ¿Sara que se siente al saber que te estas
convirtiendo en famosa?
Sonreí- Aun lo estoy asimilando.
- ¿Mario donde la conociste?
Mario me miro y sonrió:
- Casualidades de la vida.
- ¿Hay algo entre vosotros?
De repente Manuel vino y tiro de mí, pero pude oír
como Mario decía:
- De momento no, pero me gustaría.
¡No podía ser! Debía de haber oído mal.
Manuel me llevo a una pared forrada donde hacían
fotos, rápidamente Mario se nos unió y yo quede entre los dos.
Entramos en una sala llena de gente famosa y
comenzaron a entregar los premios. Mario gano tres premios: A mejor cantante
juvenil masculino (lo que me hizo reír) al chico mas solidario por sus
donaciones y al joven mejor vestido.
Siguieron entregando premios:
- Al record de visitas en Internet en el menor
tiempo: Sara Gómez.
Todo el mundo se giro a verme. Tímidamente me
levante y subí al escenario donde un chico joven me entregó el premio:
- No se que decir- era la verdad- me ha pillado
por sorpresa- y me reí- Quiero dar las gracias a Mario que ha sido el que mas
me ha apoyado para cumplir mi sueño y a la gente que me ha visitado en Internet.
Muchas gracias a todos.
Baje y Mario y Manuel me abrazaron.
Mario subió al escenario y comenzó a tocar la
preciosa melodía del piano mientras cantaba. Yo estaba bailando con Manuel que
no paraba de hacerme reír. Pero algo en la canción llamo mi atención ``Te conocí
bajo la lluvia mojada y desilusionada. Ahí me robaste el corazón.´´ Comencé a
analizar la canción y me di cuenta que describía el día que me conoció y todo
lo que sucedió, ¿era una coincidencia? No lo sabia pero al terminar la canción
dijo `` te quiero´´
Manuel me miro:
- ¿Te has dado cuenta al fin?
Eso me lo confirmó. No sabía que hacer. Deje de
bailar y me senté en nuestra mesa me quede absorta en mis pensamientos. Era mi
amigo y le quería pero no sabia si de la forma que el quiere. Quiero a Alan y
también que vuelva. Había sido el único que me hacia sentir mariposas en el
estomago. Pero no quería perder a Mario había sido el mejor apoyo que he tenido
en estos momentos tan difíciles que he pasado.
No hable en toda la noche y en la limusina estuve
todo el rato mirando por la ventana. Al llegar a la casa de Mario (me quedaba a
dormir ahí) subí las escaleras corriendo y me metí en mi habitación.
Estaba nerviosa y no paraba de dar vueltas por la
habitación, necesitaba relajarme de alguna forma.
Menos mal que siempre llevaba un chándal conmigo.
Me lo puse y baje a bajo con cuidado porque no quería encontrarme ahora mismo
con Mario. Le pregunte a una de las asistentas donde estaba el gimnasio y me lo
indico.
Era un gimnasio enorme con todo tipo de material.
Comencé a buscar un saco de boxeo.
Lo encontré en una esquina alejado de todo. Me
acerque y comencé a golpearlo para relajarme, y no solo con los puños sino que
los alterne con patadas.
De repente sonó mi teléfono:
- ¿Diga?
- Hola Sara soy Cristina.
- ¿Qué pasa Cristina?
- Se donde esta Alan.
- ¿En serio?
- Si, esta viviendo en un piso alejado de la
ciudad.
- Dame la dirección.
Me la dicto y yo la apunte en el móvil.
- Gracias Cristina.
- De nada y suerte.
Subí a mi habitación corriendo y me cambie de
ropa. Necesitaba llegar como sea.
Mientras bajaba las escaleras acalorada me choque
con Mario:
- Perdón – y continué bajando las escaleras.
Mario me alcanzo:
- ¿A donde vas? Es muy tarde
- Tengo algo muy importante que hacer.
- Oye lo de antes…
- No pasa nada después hablamos sobre ello.- Le sonrei y le di un beso en la mejilla.
- ¿Vas a volver?- me pregunto preocupado.
- Si pero no se a que hora. ¿Tienes moto?
- Si ¿por que?
- La necesito ¿me la puedes prestar?
- ¿La sabes conducir?
- Si pero no me gusta mucho.
Busco en sus bolsillos y me lanzo las llaves.
- Ten cuidado.
- Gracias
seguro que tiene un accidente, espero que no xD Bonito capítulo :) aunque me gusta mas mario que alan
ResponderEliminarEstoy contigo, me gutaria q se quedara con mario, es tan mono jeje y el capitulo hermoso, me encantó.. :) un besitoo!
EliminarNunca se sabe chicas pero creo que las cosas pueden ser lo que no parecen. Gracias chicas vuestros comentarios me alegran. Un beso a las dos.
EliminarFirmado: Sarus