sábado, 13 de abril de 2013

CAPITULO 1




Tengo 24 años me llamo Sara Gómez ahora mismo famosa e importante por mi carrera como cantante pop, aunque aparte de esto cree me propia empresa que de momento esta teniendo éxito. Nunca pensé que mi manager me obligara a salir con un hombre arrogante, insensible y cruel: Daniel. El hijo mimado de un millonario.
Me sacaba de quicio estar con el y discutíamos todo el rato en el cual no había cámaras grabando o fotografiando. Era demasiado importante la imagen.
Os preguntareis que hago en la calle. Pues acabo de salir corriendo por la puerta trasera  de un restaurante tras haber discutido con Daniel y haberle tirado una copa de vino a la cara.

Después de caminar varias manzanas llegué a mi edificio. Al entrar salude a mi guardia de seguridad:

- Hola Marcos.

Asintió con la cabeza y me respondió:

- Buenas noches señorita Gómez.

Entre en el ascensor y metí mi clave para que me llevara a mi duplex. Después de un rato las puertas se abrieron y aparecí en la entrada de mi casa. La había decoradado de una forma moderna, al abrirse el ascensor se encontraba una sala con una mesa de madera en la cual me gustaba poner flores. Enfrente de la mesa se encontraban unas enormes puertas de madera. Busque las llaves en mi bolso y entre con cuidado en casa para no hacer ruido. Como la casa era demasiado grande y me sentía sola, invite a mis amigas a vivir conmigo. El salón era grande con varios sofás en color azul con las paredes en blanco. La cocina era estilo americana en blanco y negro. Me acerque a la nevera y saque una pequeña botella de agua.
Subí las escaleras y me dirige a mi cuarto el cual tenia baño propio aunque todos los dormitorios los tenían para que no hubiese problemas entre las chicas.
Me desvestí y me metí a la ducha y deje que el agua corriera por mi cuerpo hasta que empecé a tener frío. Salí y me puse mi vestido de seda rosa para dormir.
Agarre mi almohada fuertemente y empecé a llorar. Nunca lo hacia delante de las personas que me querían ver sufrir. Aparentaba externamente ser una chica dulce y buena con la gente que conocía pero dura y fría con los demás. Tuve varias rupturas en mi adolescencia que hicieron que dejara de parecer tan vulnerable. La ruptura que mas me afecto fue la de Alan fue el único que me hacia sentir mariposas y cosquilleo en el cuerpo cuando estaba con el pero desapareció por completo. Habiendo pasado 6 años y seguía pensando en el. Empecé a salir con Mario pero rompimos porque sabía que todavía sentía algo por Alan aunque seguimos manteniendo una muy buena amistad después de haberme ayudado con la ruptura de Alan.
Rápidamente deje de llorar porque mañana tenia un cliente al que atender y no quería aparecer con los ojos rojos e hinchados. Al rato me quede dormida.

Me desperté con sueño pero tenia que ir a la empresa. Me duche y me puse mi conjunto era algo básico, mi falda negra con mi camisa blanca, mi chaqueta, mi bolso y los zapatos de mi colección.
Baje las escaleras y encontré a mis amigas desayunando:

- Buenos días chicas.

- Buenos días -me dijeron las dos.

Me bebí rápidamente mi vaso de café. Me iba a ir cuando Sandra me pregunto:

- ¿Qué tal la cita de anoche con Daniel?- ellas sabían que lo odiaba.

Arrugué la nariz:

- Le tire una copa de vino a la cara.

Sandra y Clara me miraron sorprendidas. Éramos amigas desde el instituto y ahora trabajaban en mi empresa y diréis como son tus amigas por eso las has contratado pero no, fueron trasladadas de una de las empresas con la que estoy asociada.
De repente se pusieron a reír descontroladamente así que las deje y me dirigí a la puerta pero antes de salir les grite:

- ¡No lleguéis tarde!

Al llegar a la puerta del edificio encontré a Marcos esperándome con la puerta del mercedes negro abierta como siempre. Cuando salgo suelo llevar conmigo a Marcos es mi guardia y cuando voy al trabajo mi chofer.

- Buenos días Marcos.

- Buenos días señorita Gómez.

- Cuantas veces le tengo que decir que me llame Sara- le sonreí, llevaba 3 años trabajando conmigo y nunca había tenido queja alguna pero el se empeñaba en llamarme señorita Gómez.

Sonrió:

- Buenos días Sara.

- Mucho mejor- me reí.

En el coche recibí una llamada:

- Sara Gómez ¿Diga?

- Señorita Gómez el cliente vendrá en 1hora

- Gracias Andrea prepáreme el contrato.

- Claro señorita Gómez. Por cierto su manager ha dicho que hoy tiene un concierto en una fiesta.

- Bien Andrea y gracias- ``genial´´ pensé irónicamente.

Al poco rato llegue a el edificio de mi empresa, era bastante grande. Al llegar había un montón de cámaras por lo que Marcos me tuvo que escoltar hasta recepción. Me hacia gracia ver a Marisa la recepcionista dando golpes a los fotógrafos con revistas de moda. En el fondo mi empresa era muy familiar y Marisa, era una mujer de 50 años con el pelo teñido de rubio platino y bajita. Para mi es como la mama de la empresa.

- Gracias Marisa- y me acerque a darle un beso.

- De nada mi niña.

Subí en el ascensor hasta la planta de gestión que era donde estaba mi oficina.

- Hola Andrea- le dije a mi sectaria.

- Buenos días señorita Gómez, le deje el contrato encima de la mesa.

Entre en mi oficina y me senté en mi silla, mi oficina era simple. Tenía un escritorio de madera en el medio de la habitación con un par de estante en la pared de la izquierda. En el otro lado tenia unos sofás en blanco con una mesa de cristal y una televisión en la pared.
Mientras se encendía el ordenador comencé a leer el contrato del cliente. Era un director de cine que quería que le hiciéramos la ropa, el maquillaje y los peinados para su película.
En ese momento sonó la puerta.

- Pase.

Andrea se asomo por la puerta:

- Señorita el cliente ya esta aquí.

Asentí con la cabeza y le dije:

- Cuando llegué hágale pasar.

 Empecé a buscar en Internet a mi cliente: Lucas Simons.
Wikipedia:
Lucas Simons heredero de la productora de cine de su padre. Varios oscars al mejor director y actor.
Volvieron a llamar a la puerta.

- Pase.

La puerta se abrió y apareció un hombre apuesto, alto y rubio de unos ojos azules que creo haber visto alguna vez. Estaba bastante musculoso y vestía un traje gris.
Me levante y le tendí la mano.

- Sara Gómez encantada.

- Lucas Simons encantado.

Cuando le toque la mano y le mire a la cara, imágenes de mi adolescencia aparecieron en mi mente. Mi profesor de educación física y mi novio, la misma persona me rompió el corazón. No podía ser ¡era el!

Espero que os guste y siento haber tardado tanto. Este capitulo se lo voy a dedicar a @Inma_CM8 Espero que te guste preciosa, ya me diras. Un beso muy fuerte a tod@s. Besitos.

4 comentarios:

  1. Holaa, cuanto tiempoo!!! ejjej q fuerteee, no m puedo creer q volvió a ver a Lucas.. a ver que pasa ejej un besitoo y sube pronto,, m encantó :))

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    1. Si, las clases absorben la mayoría de mi tiempo y los exámenes el poco que me queda por eso estoy tardando. Me alegro de que te guste :)

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  2. Hermanii soy yo! Que fuerte que sea Lucas deseandl leer el segundo capitulo tequiero!:)

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    1. Peque!! Jajaja sip es el, tranquila solo te adelanto que va a haber muchísimas sorpresas y por la tardanza pienso publicar varios capítulos como recompensa. Yo te quiero mas :)

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